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3 niñas huérfanas dejó joven dominicano baleado reparando su auto BMW en Nueva York

Un joven dominicano murió baleado en un taller de reparación a plena luz del día en Brooklyn (NYC), dejando tres bebés huérfanas. El pistolero sigue prófugo

Joharis Rivas, dominicano de 21 años que murió baleado en un taller de reparación a plena luz del día en Brooklyn (NYC), era un joven padre de tres bebés.

Rivas acababa de llegar con su lujoso BMW sedán negro al taller “Robel Auto Repair”, ubicado en Meserole St. cerca de Union Av. en Williamsburg, cuando recibió un disparo alrededor de las 2:15 p.m. del martes, según informaron la policía y testigos. El pistolero estacionó su bicicleta eléctrica frente a una cafetería al otro lado de la calle, desde allí disparó y luego huyó. Al momento sigue prófugo.

Esa zona, el Distrito 90 de NYPD, había experimentado una disminución del 17.96 % en delitos graves en lo que va de año. Hasta el martes sólo se había producido un tiroteo allí en 2025 y éste fue también el primer homicidio reportado en el área este año.

Los servicios de emergencias médicas trasladaron al joven herido al Hospital Elmhurst, pero no pudieron salvarlo y fue declarado muerto poco después. “Era un gran tipo. No tenía enemigos. Un padre perfecto”, dijo ayer al Daily News su amigo Junior Davis, atónito, frente a la casa de la víctima en Cypress Hills.

Rivas tenía tres niñas, la mayor de sólo unos dos años, comentaron sus amigos “Era un hombre de familia y trabajador. Amaba a sus hijos”, dijo Davis, cuya familia recibió a Rivas en su hogar hace un par de años y ahora prometió cuidar de las huérfanas.

No se han realizado arrestos ni identificado sospechosos. Quien posea información debe llamar a 1-800-577-TIPS (8477) y en español 1-888-57-PISTA (74782). También a través de la página crimestoppers.nypdonline.org o por mensaje de texto a 274637 (CRIMES), seguido por TIP577. Todas las comunicaciones son estrictamente confidenciales.

La violencia armada es constante en Nueva York y algunas víctimas son alcanzadas al azar con armas blancas y de fuego en calles, escuelas, el transporte público y negocios. Los enfrentamientos suelen estar vinculados con batallas entre pandilleros por el territorio y los sospechosos a veces se incriminan al alardear y publicar sobre sus crímenes en las redes sociales.

El viernes un joven latino de 22 años murió dos semanas después de ser baleado en su apartamento en El Bronx (NYC) durante el intento de robo de un collar, informaron las autoridades.

La semana pasada el pandillero Quintin Green (24) fue sentenciado a 35 años tras las rejas por matar a tiros a Shatavia Walls, una ex testigo federal, en una pelea vecinal en Brooklyn (NYC) en 2020 por fuegos artificiales ilegales, práctica que se volvió común en la ciudad durante la pandemia. Días antes un joven latino de 18 años fue arrestado y acusado de disparar fatalmente a otro adolescente hispano con el que se había peleado en Long Island (NY).

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